No se trata de comprar flores, regalar chocolates o hacer filas que acabarían con la paciencia de teresa.
Febrero ha sido marcado como el mes más romántico de todos, ya sabemos que es pura mercadotecnia, que es un pretexto para gastar dinero, y con ese pretexto nos ponemos la mascara de “yo no nací para amar, nadie nació para mi” o peor aún la de “odio a todos”. La verdad es que a nadie le importa si disfrutas o no un 14 de febrero, si quieres gastarte todo el capital del mes en un día, bien por ti, si prefieres encerrarte a ver películas para adultos está perfecto, el asunto es disfrutarlo; creemos que es una buena idea aprovechar estas excusas tan absurdas para mejorar algo en cada uno y no (tampoco nos importa si hoy eres mejor que ayer), se trata de disfrutar la vida de manera personal, aprender y seguir adelante, mejorando tus capacidades y expandiendo tus posibilidades.
Por eso, nosotros utilizamos esta fecha tan cursi, linda, ñoña, romántica, nefasta, adorable, fatídica, esperada, hipócrita, reconciliadora, etc., para asegurar que si algo deben tener en el concepto de “amor” es a ustedes mismos y las cosas que hacen durante los días que dure su vida.
Así que, hemos hablado, ahora, a amarse.
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